Colchón cuna Mimo

Los colchones de viscoelástica pueden ser adecuados para los bebés, siempre y cuando cumplan con ciertos requisitos. Es importante asegurarse de que el colchón sea consistente y que el bebé no se hunda en él, pues los bebés necesitan un soporte adecuado para su columna vertebral que se encuentra en desarrollo, además de que el hundimiento aumentaría el riesgo de asfixia por ahogamiento.

Es fundamental que el colchón sea transpirable para mantener una buena ventilación y regular la temperatura durante el sueño del bebé. Todos nuestros colchones con viscoelástica son firmes, consistentes y transpirables para que sean totalmente seguros para el bebé.

Lo ideal es que el colchón sea firme, pero una firmeza adaptada al peso del bebé. Si el colchón es demasiado blando, el bebé se hundirá en él y no dormirá seguro, pues correrá un riesgo de atrapamiento y de asfixia. Debemos pensar que un bebé no es capaz de darse la vuelta por sí mismo cuando gira por la noche y se coloca boca abajo.

El colchón de cuna debe ser firme y a la vez adaptable y cómodo, permitiendo así distribuir uniformemente la presión ejercida sobre la cabecita del bebé y reduciendo el riesgo de desarrollar plagiocefalia.

Es esencial encontrar ese equilibrio para garantizar un descanso seguro y cómodo para tu bebé, al mismo tiempo que un crecimiento saludable.

Los colchones de Ecus Kids están concebidos para una transpirabilidad óptima. El uso de un protector de colchón no es necesario, pero es normal que muchas mamás y papás estéis más tranquilos si lo usáis.

Como es lógico, cualquier protector o sábana que se coloque entre el colchón y el bebé va a restar propiedades de transpirabilidad al colchón. Por eso recomendamos utilizar un protector de colchón lo más transpirable posible, que deje circular bien el aire entre sus fibras con el fin de restar las mínimas propiedades de transpirabilidad al colchón.

En Ecus Kids disponemos de la sábana bajera impermeable Soft. Esta sábana súper suave al contacto con la piel de tu bebé permite la circulación del aire y la expulsión del CO2, evitando así cualquier riesgo. Conseguirás un mejor mantenimiento del colchón, pues permanecerá seco y listo para que el bebé duerma sin humedades y sin manchas indeseadas.

Cada bebé tiene un ritmo de crecimiento diferente, por ello no hay una sola respuesta posible. Cuando veas que tu bebé ya no está cómodo, escala los barrotes para salir de la cuna y/o necesita más espacio para dormir, ese será el momento ideal para realizar la transición de la cuna a una cama junior. Esta etapa suele corresponder con los 2 años aproximadamente, aunque nuestros colchones de cuna pueden usarse hasta los 20 kg de peso.