Colchones minicuna

Durante los primeros meses de vida, los bebés pasan de media entre 12 y 16 horas durmiendo, con lo que es imprescindible que el colchón de minicuna o del cochecito sea un colchón de calidad que garantice su correcto desarrollo y crecimiento. Un buen colchón de minicuna es importante para el sueño y la salud del bebé, así como para la tranquilidad y la comodidad de las mamás y papás.

El colchón de minicuna o colchón para capazo debe aportar un soporte adecuado lo suficientemente firme y transpirable para que el bebé no tenga ningún peligro de asfixia, y lo suficientemente cómodo y adaptable para que el cuerpo y cabecita del bebé no sufran presión alguna y no den lugar a deformaciones craneales como la plagiocefalia.

Los colchones de minicuna de la gama Care de Ecus Kids son los únicos con certificado sanitario por la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (AEMPS) para la prevención de la plagiocefalia y la asfixia. Están diseñados y fabricados específicamente para los bebés recién nacidos o con pocos meses de vida. 

Un colchón de minicuna adecuado ayuda a prevenir problemas de salud como la plagiocefalia, una deformidad craneal que puede ocurrir cuando el bebé duerme en una superficie demasiado plana y dura durante periodos prolongados de tiempo. Los colchones de minicuna de Ecus Kids distribuyen el peso del bebé de manera uniforme, disipando la presión y ayudando a prevenir la plagiocefalia.

Para decidir cuál es el mejor colchón minicuna para tu bebé debes asegurarte de que no es ni muy firme ni muy blando y que tiene el tamaño adecuado para ajustarse perfectamente a la minicuna, de manera que el bebé no pueda quedar atrapado en los bordes.

Es importante que sea un colchón transpirable, tanto en su tejido como en su espuma, para que el aire circule libremente y se evite la acumulación de bacterias o humedad. También los tejidos deben ser suaves e hipoalergénicos para no provocar irritabilidad en la piel del bebé. Y, sobre todo, asegúrate de que está fabricado respetando los estándares de calidad, como el certificado OEKO-TEX Standard 100 que garantiza que no contiene ninguna sustancia tóxica o el registro sanitario.